Residencia en Chile y turismo de nacimiento

La residencia legal es un permiso de residencia, que puede ser permanente o temporal. Te da derecho a vivir en el país todo el tiempo que quieras, a entrar y a salir, a solicitar el carné de conducir, a trabajar (según el visado, pues el Rentista no lo permite) y a buscar trabajo. Con un permiso de residencia, puedes contar los días hasta que te conviertas en ciudadano chileno naturalizado. Con la residencia temporal, deberás permanecer en el país unos 10 meses al año para solicitar la residencia permanente. Una vez que tengas la residencia permanente, no podrás salir del país durante más de dos años consecutivos para no perderla. La residencia fiscal, sin embargo, es la obligación de pagar impuestos en el país. La residencia fiscal también te da derecho a acogerte a los convenios de doble imposición de Chile y a solicitar un certificado de residencia fiscal. La residencia fiscal se obtiene si se cumple una de dos condiciones: o una estancia en el país de 6 meses consecutivos dentro de un mismo año civil o una estancia de más de 6 meses en total, consecutivos o no, a lo largo de 2 años civiles consecutivos. Si obtienes el estatus de residente antes de la residencia con la intención de vivir en Chile permanentemente o por un período de tiempo más largo, se aplicarán los tipos impositivos normales desde el momento de la entrada al país.