Pasos legales y trámites en la aduana para vender mercancías en la UE con tu negocio FBA

Hoy tenemos en Librestado un artículo sobre la importación y exportación de mercancías para negocios FBA. Viene escrito por un blogger invitado alemán experto en aduanas: Tobías Lindner.

El artículo de nuestro invitado es una continuación a nuestros artículos sobre el IVA europeo en productos digitales y en productos físicos. En un futuro no muy lejano publicaremos otro artículo sobre FBA, pero en esta ocasión hablando a fondo del aspecto fiscal (si quieres estar al tanto, te aconsejo seguirnos en facebook o apuntarte a nuestra newsletter).

Lo que tendrás que hacer con tu negocio FBA para vender legalmente mercancías en la UE

En este artículo voy a mostrarte lo que debes tener en cuenta a la hora de importar, exportar y enviar mercancías tanto dentro como fuera de la Unión Europea a través del programa de Amazon FBA.

La UE es una asociación de países independientes. Entre otras cosas, se ha acordado intentar simplificar en gran medida el comercio de mercancías dentro de la zona común.

Para lograrlo, se han derogado las restricciones comerciales nacionales y las ha reemplazado por un solo acuerdo (el Tratado de la UE).

Eso sí, si vendes fuera de la UE o introduces productos de fuera a la UE, te encontrarás con otra situación.

Los países suelen utilizar las aduanas para aumentar el atractivo de los productos nacionales y protegerlos de la competencia extranjera, en otras palabras, para promover la venta de productos nacionales. Por eso, los artículos comprados en el extranjero están sujetos a una tasa arancelaria, para encarecerlos.

Por lo tanto, si compras productos de países no comunitarios para vender a través de FBA en la UE, tendrás que pasar por las aduanas inevitablemente. La idea con el artículo de hoy es ayudarte a prepararte para ello y mostrarte la posibilidades que hay para que montes tu negocio de forma legal y eficiente.

Registra tu empresa en la aduana con el número EORI (registro como operador económico).

A efectos legales, no importa dónde se encuentre tu empresa en Europa: España, Estonia, Chipre, Malta, Bulgaria… No importa, porque te estarás moviendo dentro del territorio de la Unión Europea.

Para que puedas recibir productos comprados en el extranjero, es necesario que te registres como operador económico ante las autoridades competentes locales. En general serán las autoridades aduaneras quienes se encargan de controlar que todo se desarrolla correctamente.

EORI es la abreviatura de «número de registro e identificación de operadores económicos». Con la ayuda de este número de registro tu empresa podrá importar artículos a la UE, enviarlos dentro de ella e incluso exportarlos desde la zona común a un país tercero.

Por cierto, ten en cuenta que antes de realizar cualquier transacción (compra o venta) con socios comerciales que NO residan en el mismo país que tú, tendrás que verificar el número EORI. Esto se hace a través de la página web de la Comisión Europea.

Solo si el número de tu socio comercial aparece como válido, podrás importar, exportar o enviar la mercancía.

En España, puedes llevar a cabo tu registro a través de la Agencia Tributaria. Tendrás que acceder con tu firma electrónica y seguir los pasos descritos.

Del mismo modo, si te has dado de alta en FBA con una empresa estonia, búlgara o lo que sea, deberás solicitar tu número EORI a la autoridad competente allí (generalmente puede ser Hacienda o la autoridad aduanera).

Ten en cuenta que el número EORI es único de la empresa. Así, si actúas como autónomo o con una sociedad limitada en España, recibirás un número EORI de la Agencia Tributaria bajo solicitud previa, pero si por cualquier motivo decidieras trasladar tu empresa a otro país europeo, como Bulgaria o Chipre, deberás cancelar el registro de tu número EORI en España y solicitar el EORI en el nuevo país. No podrías quedarte con tu número anterior y usarlo para el negocio de Estonia.

Proveedores extranjeros – lo que debes tener en cuenta antes de comprar en el extranjero y cómo hacerlo correctamente

Gracias a la globalización, comprar productos desde cualquier parte del mundo ya no supone un problema. Las grandes compañías de logística ahora están tan bien organizadas que puedes adquirir tus productos prácticamente desde cualquier región.

No obstante, hay algunos aspectos a considerar antes de importar bienes a la UE para que puedas después venderlos sin problemas.

La UE como conjunto de países no es más que la consecuencia de una zona común económica. En aquellos casos en los que empresas de diferentes zonas económicas comercien entre ellas, tendrán que seguir ciertos pasos.

Lo primero que has de preguntarte es si existen restricciones comerciales unilaterales o bilaterales entre los países y en caso de que fuera así, qué es lo que estas restricciones suponen para tu negocio.

En un principio puede sonar complicado comprobarlo, pero en realidad es bastante simple. Son los llamados embargos, que a menudo se imponen unilateralmente contra países extranjeros.

Por ejemplo, si deseas comprar productos de Corea del Norte, Iraq o el Congo, inevitablemente darás con ellos.

Aquí puedes encontrar una lista de países y zonas económicas a los que la UE ha impuesto un embargo (entre ellas EEUU y China). En la lista también se menciona el tipo de restricción que se ha impuesto. Por ejemplo, a Corea del Norte se le ha restringido casi todo tipo de comercio, mientras que China solo tiene un embargo de armas. (También tienes una lista española de embargos).

Lo contrario de los embargos serían los tratados de libre comercio. Existen un montón de tratados de este tipo y pueden facilitar la introducción de productos desde dichos países.

Además de prestar atención a los embargos y tratados de libre comercio, también tendrás que tener en cuenta la seguridad de los productos. Según el caso, necesitarás certificaciones específicas para la importación de los productos que vas a comercializar en la UE.

En la UE existen normas específicas para muchos productos. Están pensadas para garantizar la seguridad de las personas, por ejemplo, en cuanto la toxicidad de ciertas sustancias.

Cuanto más complicada es la estructura de un producto, más probable es que se pidan pruebas de que es seguro su uso. Y con esto llegamos al centro del asunto: ¡la inocuidad!

Tienes que poder demostrar que el producto que deseas importar a la UE cumple con sus estándares y, por lo tanto, que se puede distribuir con total seguridad. Los productos que pasan la prueba llevan el «Marcado CE«.

De nuevo, suena más complicado de lo que es. Puedes leer aquí sobre los tipos de productos que requieren marcado CE.

En principio, los productos que no se encuentren en dicha lista no requieren marcado CE. Sin embargo, según el caso puede ser aconsejable conseguir un certificado de conformidad basado en una prueba de producto. Tienes más información sobre el marcado CE en la página de la Unión Europea.

Ten en cuenta que si alguien pidiese una indemnización por algún incidente causado por o con tu mercancía, se te considerará responsable y se te podría exigir compensación o llevar a juicio. No podrás trasladar la reclamación a tu proveedor, sino que serás responsable en primera instancia.

Por lo general, y especialmente si piensas que podría darse una situación complicada, es recomendable hacerse con un seguro de responsabilidad civil y, por supuesto, usar una sociedad que limite tu responsabilidad en lugar de trabajar como autónomo.

De esta forma estarás protegiendo tu empresa y tu patrimonio personal en caso de demandas por un mal funcionamiento o riesgo de tu producto.

La cuota a pagar depende del peligro potencial de los productos, así como del volumen de ventas y del país en el que resida tu empresa.

La mayor parte de los productos que probablemente querrías vender en Amazon o cualquier tienda de calle pasarían la prueba sin ningún problema y pueden introducirse sin mayores restricciones.

Sin embargo, es extremadamente importante conocer las regulaciones y, especialmente, sus consecuencias, ya que, repito, como distribuidor de los productos tienes la completa responsabilidad.

Ya tengo el producto que voy a vender y lo he comprado, ahora, ¿cómo debo declararlo para pagar el mínimo posible y conseguir su libre circulación en la UE?

Todas las mercancías importadas de países terceros están sujetas a supervisión aduanera en el momento de la importación, es decir, tus productos siempre tendrán que pasar por el control de aduanas. Esto está prescrito así por la ley.

Es conveniente que te introduzcas bien en la materia, ya sea de forma directa o contratando los servicios de terceros, como por ejemplo de un declarante o transportista. En el caso del transportista es muy posible que acabes pagando más de lo necesario y no te salga bien la jugada. Tener un declarante de confianza puede valer oro, o dinero.

El precio que tendrás que pagar en la aduana por la introducción de los productos dependerá de cómo estos se categoricen. Según su función y los materiales utilizados podrás intentar que te los incluyan en una categoría u otra, para se usa la nomenclatura combinada.

Cuando tu producto llega por servicio de paquetería y el agente de aduanas revisa el envío, intentará asignar la mercancía a un capítulo específico. En caso de duda, el agente te preguntará por la partida arancelaria bajo la que quieres declarar los productos, y sin duda te conviene hacer una propuesta acertada.

Generalmente te permiten sugerir una categoría, pero siempre comprueban que tu propuesta sea válida. Si no se encuentra una partida arancelaria válida, lo normal es que no te dejen declarar los artículos y que tengas que dejar la mercancía en la frontera.

Por lo tanto, esta clasificación es lo primero de lo que debes preocuparte para no entorpecer los trámites aduaneros y que no se catalogue el artículo de forma que te salga más caro de lo esperado.

En la nomenclatura combinada, los números de capítulo más pequeños contienen los productos menos elaborados. Entre ellos se encuentran, por ejemplo, animales y recursos naturales.

Cuanto mayor sea el número del capítulo, más aumenta el grado de procesamiento de los productos. Los últimos capítulos incluyen productos de alta tecnología.

Ahora puedes clasificar tus productos basándote en la designación empleada en la tarifa aduanera. A esto se le llama clasificación arancelaria. En Internet es bastante cómodo de hacer.

Ten en cuenta que los proveedores no se pueden hacer responsables de la partida arancelaria. Si tu socio comercial te dice que ingreses el código XX con un arancel del 3%, pero luego las aduanas determinan que debes declarar con un número diferente al 20%, legalmente no puedes repercutírselo, eres tú quien asume la responsabilidad como declarante aduanero.

Resumiendo, te conviene elegir la partida adecuada o buscar a alguien que la elija por ti.

Cómo asegurarte de que tus presunciones son correctas y obtener una base legal segura para la clasificación de tu producto y la consecuente tasa de aduanas

Al final es el control aduanero quien decide si la clasificación propuesta es realmente correcta.

Lógicamente, los agentes importadores tienden a elegir la tasa arancelaria más baja en función de sus intereses económicos, pero a veces esto puede dar problemas.

Si vas a dedicarte a la importación a largo plazo, cuenta con que como mucho a los dos o tres años te tocará pasar un control aduanero.

En estos controles te revisarán tus últimas importaciones y te pedirán pruebas de que todo se ha llevado a cabo correctamente.

El proceso es relativamente sencillo, eso sí, el agente de aduanas se fijará especialmente en la tasa arancelaria elegida.

Si quieres evitar sorpresas desagradables durante esta inspección, puedes solicitar información arancelaria vinculante para tus productos.

Y ahora te preguntarás, ¿qué es eso?

El trabajo de los agentes de aduanas consiste en clasificar tus productos en la tarifa aduanera, concretamente, comprobar que los has clasificado correctamente y expedir un documento que lo certifique.

Este documento es legalmente vinculante y sirve para asegurarte en caso de inspecciones o cualquier otro problema.

Si has asignado tus productos a un capítulo específico en la tarifa aduanera, debes enviar este código (partida arancelaria) con una muestra de la mercancía y la solicitud correspondiente a un departamento de aduanas.

Desafortunadamente, el proceso tarda un poco, hasta seis meses, pero así conseguirás información legalmente vinculante válida durante varios años a partir de la fecha de emisión.

Generalmente los que nos dedicamos a vender con FBA ofrecemos una pequeña cantidad de productos. Eso significa que se venden productos del mismo tipo pero, por ejemplo, de colores diferentes. Por lo general, el que vende en FBA no maneja cientos de artículos diferentes.

Esto, por supuesto, es una gran ventaja porque puedes «asegurar» el producto con información arancelaria vinculante fácilmente. El color del producto es aquí completamente irrelevante.

Y hay otra ventaja además de la protección legal: ¡la verificación en aduanas es gratis! Las autoridades aduaneras no cobran por comprobar y verificar tu clasificación.

Lo único que sí supondrá un coste es la muestra del producto que tendrás que entregar junto con la solicitud.

Al realizar la solicitud estás dando permiso a las autoridades aduaneras para que examinen la muestra, lo que puede significar entre otras cosas que la destrocen y no puedas venderla ya. En principio, este será tu único gasto si realizas tú mismo la solicitud.

¿Qué sucede durante los trámites aduaneros y cuáles son los costes?

Normalmente, al comenzar tu negocio FBA este no tendrá el tamaño ni la necesidad de tener un departamento de aduanas propio. Por ello, es aconsejable recurrir a la experiencia de los proveedores. Sobre todo los declarantes de aduanas, aunque también el servicio de paquetería o las compañías navieras, tienen el conocimiento suficiente para tratar con los artículos y realizar los trámites aduaneros correctamente.

Como es de esperar, cobran por estos costes de gestión, pero suele ser a un precio razonable. El importe depende tanto de la elección del proveedor como del alcance del contrato. Muchos proveedores cobran una tarifa plana básica por la solicitud de aduanas, así como por cada artículo que se deba declarar. Te deberás informar con antelación y elegir un proveedor de servicios en el que confíes.

Importante: ¡debes proporcionar a los proveedores los datos correctos! Si lo dejas todo en manos de tu proveedor, correrás el riesgo de pagar tasas muy altas o muy bajas.

Si has identificado un código en la tarifa aduanera de tus productos y lo has recibido confirmado por una información arancelaria vinculante, deberás enviarlo también al proveedor. Así agilizarás los trámites porque no tendrán que contactarte con dudas.

En el cálculo de los derechos de aduana siempre se especifica el precio de compra de los productos. En este caso el precio se refiere al del proveedor, que es quien lo escribe en la factura. En el despacho de aduana se determina el llamado valor en aduana. Este incluye todos los costes que hayan surgido de camino a la frontera europea. Según la región del mundo de donde provengan tus productos, te encontrarás con diferentes estaciones fronterizas.

Al comenzar tu negocio FBA lo más probable es que realices tu primer envío por avión, de modo que el primer contacto con la UE será el aeropuerto adonde lleguen las mercancías. Cuando los productos se envíen en contenedores, el puerto de destino en la UE (como Rotterdam o Hamburgo) será paso fronterizo al territorio de la UE.

¿Por qué es eso importante? En todos los casos, te vas a topar con costes de transporte para los productos.

A menudo, la compra del producto incluye el transporte hasta la casa o el almacén del cliente. Por lo tanto, si los gastos de transporte del paquete son de 200 $, por lo general estará cubierto el transporte de tu proveedor chino al almacén de Amazon.

Sin embargo, para el valor en aduana solo cuenta el camino hasta la frontera de la UE. Como resultado, el coste total del envío se puede reducir desde la frontera de la UE hasta el almacén de Amazon, ya que ese recorrido se encuentra dentro de la UE. Después de los trámites aduaneros en el territorio de la UE, los productos pueden circular libremente y sin restricciones comerciales.

Los costes por mercancías transportadas en contenedores hasta un puerto de la UE son relativamente fáciles de delimitar. Para el valor en aduana son relevantes todos los costes relacionados con el transporte.

Esto significa que la tarifa portuaria y de manipulación en China, así como en Rotterdam o Hamburgo están incluidos en el valor en aduana. El transporte por camión de la mercancía al almacén podría descontarse si ya se hubiera pagado al proveedor.

Lo que es un poco más difícil de delimitar es el flete aéreo, ya que un avión procedente del Lejano Oriente tendrá su cruce de frontera en algún lugar del extremo oriental de la UE.

Como nadie puede ni quiere influir en la ruta de vuelo, hay impuestos globales para hacerlo más fácil. Solo es necesario conocer el país desde el que se enviarán los artículos a la UE.

Si te vas a Asia, verás que está dividida en diferentes zonas. Esto simplemente tiene que ver con las distancias, que pueden variar significativamente desde el Medio Oriente hasta Mongolia.

Por ejemplo, puedes encontrar a China en la zona L con un valor de 70. Esto representa el porcentaje de los costes de transporte que deben incluirse en el cálculo del valor en aduana.

Llevemos todo lo anterior a la práctica y pongamos que quieres vender una mochila en Amazon. Puedes encontrar un proveedor en China a través de las conocidas plataformas de abastecimiento y negociar con él. Pides 500 mochilas a 4 $ cada una, por un valor total de 2000 $. Para facilitar el proceso, también contratas el transporte al almacén de Amazon a través de tu proveedor. Te cobrará 1000 $ por el transporte y enviará las mercancías por avión. Este precio incluye los costes de gestión en el aeropuerto de China y España.

Al calcular del valor en aduana, lógicamente, el valor de 2000 $ de los artículos se pasará a euros. Como indicaba la tabla anterior, hay que añadir un 70% de los costes de flete, que correspondería al 70% de 1000 $. El valor en aduana que se declarará por los artículos es, por lo tanto, de 2000 + 700 $ convertidos en euros.

Cómo recibir tus mercancías a través de la aduana de forma rápida y sin esfuerzo

Hay grandes proveedores de servicios de paquetería como DHL, FedEx, UPS o el proveedor de servicios EMS que ofrecen el servicio de declarar productos. Si quieres agilizar el proceso puedes optar por esa posibilidad. Los proveedores de servicios de paquetería tienen sus propios departamentos de aduanas, que se dedican exclusivamente a esta tarea.

Entonces, ¿por qué deberías molestarte en aprender sobre este tema y declarar tú mismo tus productos?

Deberás andarte con ojo. Si encargas los trámites aduaneros al proveedor del servicio, en muchas ocasiones estará autorizado a pagar las aduanas y el IVA sobre las importaciones con su cuenta.

Para ello, el proveedor del servicio te descuenta lo que se llama tarifa de suministro de capital. Suele rondar entre los 10 y 30 euros por trámite aduanero.

Como mencioné anteriormente, debes registrarte con anticipación en la aduana y tener un número EORI. Además, deberías ser capaz de clasificar tus productos con la ayuda de la descripción de mercancías en la tarifa aduanera y tener preparado un código para poder hacerlo.

Se sobreentiende también que tu cuenta deberá tener suficiente cobertura para los derechos de aduana y el IVA sobre las importaciones.

En el ejemplo de las mochilas, los derechos de importación serían los siguientes:

Valor en aduana 2.700 $ / 1,1 EUR/USD tipo de cambio = 2.454,54 euros

Luego el 12% de derechos de aduana de la clasificación en la tarifa = 294,54 euros

Base imponible para el IVA sobre las importaciones (EUST) = 2.454,54 + 295,54 + 300 $ del flete = 3.021,81 €

Después un 19% de IVA sobre las importaciones = 574,14 euros

Los derechos de aduana totales ascienden a 294,54 euros en aduana y 574,14 EUST = 868,68 euros.

Si tu proveedor te ofrece descuentos, también valdrán para la aduana. Siempre se cuenta el precio real pagado por los artículos y no su valor.

Conviene configurar una cuenta de cliente con el proveedor del servicio de paquetería de antemano. No suele haber problemas para hacerlo, además de que es rápido y gratis.

Antes de que tu proveedor envíe los productos desde China, debes registrar tu número EORI, el número de cliente del proveedor del servicio de paquetería y tu cuenta bancaria de negocios en el campo de dirección. De este modo el transportista dispondrá de todos los datos que necesitará durante los trámites en la aduana.

También tiene sentido indicar ahí la partida arancelaria o, por ejemplo, en el campo del destinatario de la factura o en el sobre. Así ayudarás a los de Aduanas si quieren ver los productos.

Es probable que tu transportista se ponga en contacto contigo para obtener este número a la llegada de los productos, de modo que ahorrarás tiempo si se lo das con antelación.

Claro que esa no es la única forma de hacerlo: por lo general, el envío se almacena en la aduana después de la llegada y tu transportista se comunicará contigo para informarte sobre el uso posterior de los productos. Podrías entonces enviarle los datos relevantes y encomendarle los trámites aduaneros.

La mayoría de las veces tendrás que pagar la tarifa de aportación de capital y, por supuesto, todos los impuestos, además de una posible una tarifa de procesamiento que probablemente incluirá el coste del almacenamiento provisional. Esta es otra opción, pero te causará gastos adicionales.

Ya has pagado los aranceles, ¿y ahora qué?

Ahora que las mercancías han pasado las aduanas y has pagado, podrás disponer de tus productos libremente. Oficialmente a esto se le llama «despacho a libre práctica (del propietario)». Al final esto simplemente significa que has logrado importar los productos a la UE y ahora puedes venderlos. La supervisión aduanera se completa con la entrega de la mercancía, después de lo cual podrás disponer de ella libremente.

Según lo acordado, tu proveedor de transporte recuperará los productos en las aduanas y los entregará en el lugar destino. Allí se procesarán, recopilarán y prepararán para la venta. Ahora podrás venderlos tan pronto como tengas el visto bueno de tu proveedor, como Amazon.

Debes guardar bien la notificación fiscal o de aduana. Si has subcontratado tu contabilidad, envía el documento a tu contable en cuanto puedas.

Guardar la notificación te servirá por un lado para deducir el gasto y, por otro, como comprobante en una eventual inspección fiscal o aduanera.

Pero ¿podrían someterte a una inspección los de aduanas?

A ver, se supone que como tu negocio es FBA las autoridades aduaneras no se van a fijar tanto en ti. A la hora de decidir a quién inspeccionar, los de aduanas también se guían según la cantidad de dinero (y producto) que se mueve, y en los controles suelen centrarse en las compañías que importan productos por cientos de miles o incluso millones de euros, porque probablemente allí se encuentran los peces gordos y los casos relevantes para el derecho aduanero

Ahora bien, tú también puedes toparte con una inspección de aduanas. Si tergiversas de forma inconsciente un envío de importación y llama la atención en la aduana, lo mejor es que te ocupes de ello lo antes que puedas y aclares la situación.

Al principio de este artículo dije que, de ser posible, deberías obtener la máxima seguridad jurídica posible para tus productos.

Será fantástico si consigues pagar un porcentaje bajo en las aduanas y que el proveedor pase la partida arancelaria a través de la aduana, pero hay que ser precavido.

Te recomiendo encarecidamente que confirmes este número con una información arancelaria vinculante (IAV) y así consigas seguridad jurídica en tu negocio.

Con una IAV válida para tus artículos y una notificación fiscal y de aduanas, según las cuales has pagado derechos de aduana con la partida arancelaria confirmada, puedes esperar con tranquilidad la inspección aduanera.

¿Cómo puedes ahorrar en trámites aduaneros?

Llegados a esta situación, el envío de la primera muestra es de vital importancia. Cuando tienes un negocio FBA sueles encargar estas muestras a los proveedores.

Las frecuentes solicitudes de supuestos distribuidores a los fabricantes chinos y el hecho de que muchos se aprovechan de las buenas condiciones ha llevado a que, en ocasiones, se exijan precios exagerados por las muestras. De esta forma los comerciantes chinos evitan a aquellos usufructuarios que solo quieren productos baratos.

Muchos vendedores hacen hincapié en que el precio de los productos de muestra se cobrará al hacer un pedido. Pero no solo los vendedores compensan los costes. Si declaras dicho envío como envío de muestra, normalmente estará exento de derechos de aduana. Aquí es indispensable que los artículos nunca se vendan a clientes finales.

Otra forma de ahorrar dinero es haciendo uso de los servicios de consolidación. Cuando busques un proveedor de un producto verás que hay una gran variedad. Para evaluar individualmente a los proveedores, puedes pedir una muestra individual a cada uno. Si los envías a un servicio de consolidación en China, agruparás el envío de varias muestras y se te cobrará un único gasto de envío de China a la UE.

Tu proveedor de servicios de transporte lo tratará como un envío y la aduana también. Con este procedimiento evitarás tener que pagar varias veces una tarifa de flete por todo el material de relleno que habrás metido en la caja. Además, solo tendrás que pagar los costes de gestión en la UE a tu proveedor una vez.

Todo el que comience su negocio de FBA estará realmente ansioso por poder importar, almacenar y luego vender productos completos y terminados. Esa es sin duda la forma en que muchos deberían abordarlo, porque es la forma más fácil de comenzar un negocio.

Si te va bien y aumentas los volúmenes de importación, puede valer la pena analizar más de cerca el producto. Teniendo en cuenta tu partida arancelaria y la correspondiente composición del producto, puedes mirar si es posible ahorrar algo en los derechos de aduana y en el IVA proporcional sobre las importaciones.

¿Es más barato usar un tejido natural o de plástico? ¿Hay algún metal más barato en los trámites aduaneros? ¿Tiene sentido enviar ciertos componentes? Puedes organizar el montaje en España, Estonia, Polonia o en cualquier parte de la UE a través de una empresa y, al final, puede resultarte más económico.

Pero no deberías pensar en estas cosas hasta que no tengas un negocio que funcione y quieras empezar a centrarte en los detalles. En este sentido, siempre deberías tener en cuenta toda la cadena de procesamiento. No te vendrá bien que tu proveedor use otros materiales porque bajará la calidad.

Además, tampoco ganarás nada si te envía componentes más baratos, pues el envío adicional a un proveedor en la UE y el ensamblaje acabarán costando más de lo que te ahorrarás. Necesitarás artículos de una gran calidad o una gran cantidad de ellos para que eso te acabe saliendo rentable.

Mi conclusión y recomendación sobre lo que deberías hacer con tu negocio FBA

A la hora de montar un negocio FBA se suele dejar de lado el tema de las aduanas. Es una lástima porque con una buena preparación y cooperando con las autoridades puedes asegurar tu negocio e incluso reducir los costes, mejorando tu margen.

Si, por el contrario, no pagas lo que deberías en la aduana (por ejemplo, porque en la factura se indique un valor inferior al real), esto supondrá un riesgo enorme para tu negocio. Da igual que sea de forma consciente o inconsciente. No es que intente ponerme en lo peor, pero las consecuencias serían similares a dar un dato falso en la declaración de la renta.

En un control aduanero te pueden imponer derechos de importación por los tres años anteriores, lo que puede suponer el fin para algunos.

Ten en cuenta que el negocio FBA a menudo se monta con escasos recursos como empresa individual, incluso como autónomo (en este caso te aconsejo especialmente trabajar siempre a través de una sociedad) y si llevas tu negocio FBA como autónomo, sin limitar tu responsabilidad, te pueden exigir responsabilidades como particular.

Recomiendo que en tu negocio apuestes siempre por la seguridad jurídica y la integridad. Es posible que a corto plazo obtengas algún beneficio más haciendo declaraciones falsas, pero a la larga estás poniéndote a ti y a tu negocio en peligro.

Hazte con un número EORI y aplica la tarifa adecuada a tus artículos solicitando información vinculante sobre las tarifas arancelarias.

De esta manera podrás vivir mucho más relajado y tendrás un negocio más sólido, porque habrás minimizado o eliminado riesgos.

Por supuesto también es buena idea que te plantees cómo ahorrar legalmente dinero en la Aduana. Sin embargo, por lo general, el tiempo que te llevará desarrollar un plan y ponerlo en funcionamiento solo merecerá la pena si antes has conseguido hacer del tuyo un negocio próspero y seguro a largo plazo.

2 comentarios en «Pasos legales y trámites en la aduana para vender mercancías en la UE con tu negocio FBA»

  1. ¿El IVA que se paga, como empresa, a la aduana al importar algo se puede después utilizar como deducible de impuestos? Es decir, así como el IVA no se paga entre empresas, o se descuenta en la declaración si se llega a pagar ¿El IVA de importación también se regresa o se descuenta en favor de la empresa? ¿O hay que considerarlo parte del costo del producto y no lo regresarán ni lo descontarán de los impuestos? ¡Esto es muy importante para determinar cuánto va a costar realmente a la empresa el producto! Gracias.

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