Residencia en Croacia para pequeños empresarios y criptoinversores

¿Buscas un país mediterráneo, con buen clima, grandes paisajes, relativamente barato y con pocos impuestos? Entonces el artículo de hoy te interesa.

Por supuesto, en Librestado con nuestra máxima de ir allí donde mejor vayamos a estar, no podemos resistirnos a un Estado que nos trate bien. La residencia en países que ofrecen valor siempre es algo a valorar.

En nuestro blog ya hemos informado sobre varios países de la antigua Unión Soviética, tales como Rumanía, Bulgaria o la República Checa, que, irónicamente, nos ofrecen una bastante mayor libertad que los antiguos países occidentales y cuentan con excelentes regímenes de baja tributación. Hoy, vamos a hablar de Croacia. El país ex yugoslavo se está integrando cada vez más en Europa, al igual que Montenegro.

Croacia ha sido recientemente objeto de debate por ser uno de los únicos doce países libres de impuestos a las criptodivisas. Croacia es un lugar muy atractivo para las pequeñas y medianas empresas gracias a sus bajos impuestos. Con sus hermosas playas y su agradable clima mediterráneo, el país es uno de los más desarrollados entre los antiguos miembros de Yugoslavia. Zagreb, Split y Dubrovnik son las ciudades más importantes y cuentan con conexiones aéreas con la mayoría de los países europeos. Además, el país forma parte de la Unión Europea y ha adoptado el euro como moneda oficial el 1 de enero de 2023.

Los no europeos también pueden solicitar un visado de nómada digital para despreocuparse de la fiscalidad de sus ingresos extranjeros.

Trasfondo de Croacia en Europa

Croacia es una de las seis repúblicas surgidas de la desintegración de la antigua Yugoslavia. El país tiene una superficie de 56 594 km² y una población de 4,1 millones de habitantes.

En 2020, Croacia tenía la mayor renta per cápita de las antiguas repúblicas yugoslavas: 13 822 USD, casi el doble que Serbia (7 666 USD).

Con su acceso al mar Adriático, el país cuenta con algunos de los paisajes naturales más bellos de toda Europa. Sus playas de aguas cristalinas atraen a turistas de toda la región, que inundan el país durante el verano europeo. Además, el país es uno de los más seguros de Europa, tiene un entorno tranquilo y un bajo costo de vida.

La (ahora ya antigua) moneda local, la kuna (HRK) se cotiza a 7,54 HRK por euro, y el costo medio de la vida en el país es de 795 €. En comparación, el costo medio de vida en Portugal —el país más barato de Europa Occidental— ronda los 1500 €. Por lo tanto, Croacia combina belleza natural, buenas conexiones con Europa y un costo de vida asequible y barato, aunque dependa en gran medida de la ubicación —en la costa, y especialmente en destinos como Hvar o Dubrovnik, puede ser mucho más caro—.

De todas formas, con la introducción del euro desde el 1 de enero de 2023, es muy posible que los precios, poco a poco, suban.

Junto con la introducción del euro también ha llegado la membresía de Croacia en la zona Schengen. Esto tiene ventajas y desventajas.

Para los no europeos, Croacia era uno de los países en los que podían quedarse durante 90 días una vez que su visado (también de 90 días) en los países Schengen había expirado. Pasado dicho tiempo podían volver a pasar 90 días en la zona Schengen. Esto ahora por supuesto ya no funciona.

Sin embargo, para aquellos no europeos que tengan o adquieran residencia en Croacia, moverse por la Europa Schengen resultará mucho más sencillo.

Y, ¿cómo funcionan los impuestos en Croacia?

El impuesto de sociedades en Croacia es del 10 % sobre los beneficios hasta 7,5 millones de HRK (prácticamente un millón de euros). Después, el tipo de impuesto de sociedades asciende al 18 %, lo que hace que el país sea menos atractivo que, por ejemplo, Hungría, Bulgaria o Rumanía. Sin embargo, el impuesto sigue siendo ligeramente inferior al de la República Checa (19 %).

El país aplica una retención del 10 % sobre los dividendos. Dicho porcentaje es inferior al de la República Checa y Hungría (15 %). En cuanto a la remuneración a través de los dividendos, el 10 % ya es más bajo que lo que pagas en un buen número de países.

En total, hay 128 ciudades en Croacia y el impuesto de sociedades se recauda a nivel federal. Sin embargo, algunas ciudades del país también tienen sus propios impuestos. Como siempre, el tipo impositivo depende del domicilio fiscal. Según el gobierno croata, las tasas se cobran en base a los siguientes criterios:

• Municipios: hasta el 10 %
• Ciudades de menos de 30 000 habitantes: hasta el 12 %
• Ciudades de más de 30 000 habitantes: hasta el 15 %
• Ciudad de Zagreb: hasta el 18 %

A nivel personal, el tipo impositivo para quienes ganan hasta 360 000 HRK (50 000 €) al año es del 20 %. Los salarios superiores a esta cifra están sujetos a un elevado tipo impositivo del 30 %. Por tanto, Croacia no es tan atractiva para los empleados y autónomos que trabajan activamente en el país. Todas las personas con residencia fiscal en Croacia están sujetas a impuestos sin importar de dónde provengan sus ingresos. Además, tienes normalmente tienes que cotizar a la seguridad social, algo que se puede evitar si cobras a través de dividendos, en lugar de sueldo.

El tipo del IVA en el país es en general del 25 %. Sin embargo, algunas áreas están gravadas con un 13 % y otras, como la alimentación o la educación, están gravadas con un 5 %. Para los empresarios, el tipo elevado es en gran medida irrelevante, ya que suele aplicarse el principio de inversión de la carga (Reverse-Charge) o el principio del país de consumo.

En el contexto de la propiedad inmobiliaria, existe el impuesto sobre transmisiones patrimoniales. Este impuesto grava toda transmisión de bienes inmuebles —por ejemplo, la venta, donación o cambio de propiedad por herencia—. El tipo impositivo es del 3 % del valor del inmueble, pero existen algunas excepciones. El país también grava con el impuesto de sucesiones el dinero en efectivo, los activos financieros y los bienes muebles.

Beneficios fiscales en Croacia

Ahora vamos a volver al contexto del título, en el que decíamos que Croacia es interesante para pequeños y medianos empresarios y para inversores en cripto.

Croacia no es exactamente un paraíso fiscal, pero tiene un sistema muy ventajoso para las pequeñas empresas. Los autónomos y los pequeños empresarios que facturan menos de un millón de euros al año tienen una de las cargas fiscales más bajas de Europa del Este.

Como no hay impuestos directos sobre los bienes inmuebles, el país también es una excelente opción para quienes quieran invertir en este mercado. La compra de bienes inmuebles también facilita la obtención de la residencia permanente en el país como ciudadano no comunitario.

Para las inversiones a largo plazo en criptodivisas, el país ofrece la exención fiscal, ya que Croacia tiene una legislación fiscal favorable a las criptodivisas. A excepción de las actividades de staking y minería (cuyas actividades te obligarían a pagar impuesto sobre la renta), se aplican exenciones especiales a las transacciones y el comercio de criptodivisas. Para poder aplicar la exención deberás mantener tu inversión cripto durante al menos 2 años. Eso sí, puedes comprar y vender entre criptomonedas sin que eso cuente como “salirse de la inversión”.

Por ejemplo, supongamos que hoy has comprado Bitcoin y has obtenido ingresos Si dejas esa cantidad en stablecoins y no retiras tu beneficio antes de 2 años, no pagarás impuestos por dichos beneficios.

Otra ventaja reside en que el período que debes mantener tu cripto se aplica ya desde la primera compra. Así que si compras Bitcoin (BTC), luego cambias a USDT y después vuelves a cambiar a BTC, el período cuenta desde la fecha de la primera compra. Si cambias a moneda fíat antes de que expire el período, tendrás que contar con un impuesto del 10 % sobre las ganancias de capital en la transacción. Esto sigue siendo mucho más bajo que el tipo impositivo del 15 % en Hungría, del 20 % en el Reino Unido y hasta del 37 % en Estados Unidos.

Por cierto, la exención fiscal tras un período de tenencia de 2 años no se aplica a las criptomonedas, sino también a las acciones y otros valores. Con un impuesto sobre los dividendos del 10 % y muchos convenios de doble imposición, la residencia también resulta más que interesante para particulares. Croacia tiene convenios de doble imposición con más de 60 países, la mayoría de ellos en Europa. En América del Norte y del Sur, solo Canadá y Chile tienen un acuerdo de este tipo con Croacia.

¿Como puedo obtener un visado o residencia en Croacia?

Los criterios para entrar en Croacia varían según la nacionalidad. Sin embargo, resulta fácil para los ciudadanos de la mayoría de países, por supuesto, más todavía para los ciudadanos de la UE.

De todos modos, si tu idea es solo pasar un tiempo en el país, en la mayoría de los casos no es necesario solicitar un visado antes de entrar en el país: para los ciudadanos no europeos, el país permite una estancia como turista de hasta 90 días.

Hay varias formas de obtener la residencia temporal en Croacia:

1. Obtener un puesto de trabajo (la duración de la estancia será igual a la del contrato de trabajo). En caso de excedencia o rescisión del contrato, un máximo de un año.

2. Comprar bienes inmuebles (por cierto, no hay impuestos inmobiliarios directos y no se requiere un valor inmobiliario mínimo). Sin embargo, con este visado no obtienes un permiso de trabajo en el país.

• Por tanto, deberás demostrar que dispones de los medios necesarios para mantenerte. Se requiere al menos el 50 % del salario medio mensual basado en el valor del año anterior (en 2022 este valor era de unos 475 € al mes).
• El visado de inversión tiene una validez de 6 meses y puede prorrogarse indefinidamente por el mismo período.

3. Abrir un negocio. La inversión mínima es de 200 000 HRK, es decir, unos 26 700 €; y tres empleados.

• Este visado te otorga un permiso de residencia de un año y puede ser prorrogado por el mismo período;
• La prórroga del visado por cinco años te da derecho a solicitar la residencia permanente.

Para obtener un permiso de residencia permanente, debes vivir en Croacia de forma continuada durante 5 años. Durante este tiempo, no podrás salir del país durante más de un total de diez meses ni ausentarte hasta seis meses en un período de cinco años.

Los extranjeros deben pagar una tasa administrativa de 630 HRK (83 €) para obtener la residencia permanente. La tasa de expedición del permiso de residencia es de 240 HRK (32 €).

Si eres ciudadano de la UE, puedes solicitar un permiso de residencia temporal en cualquier comisaría local. Necesitarás un contrato de alquiler (o vivienda en propiedad), prueba de fondos suficientes para mantenerte a ti y tu familia (de tenerla) y un seguro de salud. Por supuesto, si tienes un contrato de trabajo, eres estudiante o el traslado a Croacia es por reunificación familiar, los requisitos son algo diferentes.

Visado para nómadas digitales

Croacia también ofrece un visado especial para nómadas digitales y trabajadores a distancia. Aunque se llama visado de «nómada digital», las autoridades croatas subrayan que se trata de un permiso de residencia temporal, y sólo está disponible para los ciudadanos de fuera de la UE.

Según la ley, un nómada digital es un trabajador que presta servicios para una empresa que no es croata ni está registrada en Croacia.

El visado para nómadas digitales concede la residencia temporal y permite vivir en Croacia durante un periodo máximo de un año. No es posible prorrogar o renovar el visado inmediatamente después de este período. Pasado el año, puedes solicitar un visado de menor duración, que te da derecho a una nueva estancia de seis meses.

¿Cómo solicitar un visado para nómadas digitales en Croacia? La forma más práctica es, naturalmente, presentar la solicitud online. También puede hacerlo directamente desde Croacia o a través de una embajada o consulado croata en el extranjero.

La tasa para solicitar un visado oscila entre 420 HRK (unos 56 €) y 880 HRK (117 €). También debes demostrar que tienes al menos 202 890 HRK (unos 27 000 €) ahorrados para cubrir tus gastos de manutención durante un año —es decir, mientras dure tu visado—.

En el caso de las familias, debe incluirse un 10 % adicional por cada miembro. También es necesario contratar un seguro médico que cubra los gastos de enfermedad por la COVID-19.

Obtener la ciudadanía croata

Por supuesto, si vas a pasar tiempo viviendo en Croacia, quizás te interese obtener la ciudadanía de este país. Como sabes, la ciudadanía va mucho más allá de la residencia.

Tal vez te identifiques con la cultura, con la región, o tal vez quieras vivir en Croacia para siempre. Desde Librestado promovemos la vida sin fronteras, pero, como es lógico, también hay personas que no tienen ninguna intención de vivir una vida nómada.

Básicamente, existen tres formas de obtener la ciudadanía croata:

• Por descendencia, si al menos uno de los padres es ciudadano croata
• Por nacimiento en Croacia (uno de los progenitores debe tener la nacionalidad croata). También en el caso especial de un niño abandonado en Croacia con padres sean desconocidos
• Por naturalización

Si no tienes antepasados croatas, la vía para obtener la nacionalidad sería la de la naturalización.

Para naturalizarte croata, debes haber vivido en el país durante al menos 8 años y haberlo hecho manteniendo una residencia permanente. Además, debes superar una prueba de lengua y cultura croatas, lo cual no será fácil si tu lengua materna es el español… Eso sí, en 8 años tienes tiempo de sobra para aprender el idioma y conocer la cultura.

De todos modos, quizás al final prefieras no hacer nada. La doble nacionalidad no está permitida en Croacia, por tanto, si logras obtener la ciudadanía croata, deberás renunciar a tu ciudadanía original (por otro lado, si tu país no te permite abandonar la ciudadanía, como en el caso de los mexicanos, sí acabarías teniendo dos nacionalidades).

Según el artículo 8 de la Ley de Nacionalidad croata, la naturalización en la propia nacionalidad requiere la renuncia a la nacionalidad del otro país, si éste lo permite. Sin embargo, los descendientes de croatas y los ciudadanos nacidos en el país no se ven afectados por esta restricción.

Concluyendo

Croacia no es exactamente un paraíso fiscal, pero tiene un sistema muy beneficioso para los pequeños empresarios y es un país que ofrece un nivel de vida bastante agradable.

Los autónomos o pequeños empresarios con una facturación inferior a un millón de euros al año pueden beneficiarse de una de las cargas fiscales más bajas de Europa del Este gracias al sistema fiscal croata.

Además, si vendes tus acciones o criptomonedas tras un periodo de tenencia de 2 años, no pagarías impuestos. Las personas físicas tributan al 10% sobre sus beneficios si no cumplen el periodo de gracia de dos años, pero la compra-venta entre criptomonedas está completamente libre de impuestos.

Dado que no hay impuestos directos sobre los bienes inmuebles, el país es también interesante para este tipo de inversiones. Es más, la compra de bienes inmuebles también facilita la obtención de la residencia en el país.

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