El 25 de mayo se introdujo la ley que ha puesto histéricos a los empresarios online, la RGPD (o GDPR si te los has cruzado con sus siglas en inglés).
Escondido detrás de estas 4 letras se encuentra el nombre del Reglamento General de Protección de Datos de la UE, que se aprobó hace ya 2 años, pero que entró en vigor legalmente el pasado 25 de mayo de 2018.
La realidad es que incluso tras la ola inicial de histeria durante la que muchas empresas trataron de adaptar sus procesos y páginas web, son muy pocos empresarios los que realmente están preparados para la RGPD.