En el artículo de hoy te explicamos los cambios concretos en Estonia a nivel fiscal que afectarán a partir de 2025. También te contamos lo que suponen para tu residencia electrónica en Estonia y las alternativas que tienes en el mundo.
Los últimos años han traído grandes cambios fiscales en Estonia: impuesto sobre dividendos, impuesto sobre la renta, impuesto sobre el valor añadido, impuesto de circulación, impuesto sobre el alcohol, impuesto sobre la gasolina e incluso un «impuesto sobre los cohetes», ¡por nombrar solo algunos! Una verdadera fiesta creativa para todos los políticos, a los que se les ocurren algunas cosas para aumentar la carga fiscal de los «ciudadanos dignos». Ya escribimos en 2023 sobre cómo Estonia se está disparando en el pie a sí misma. Pero en aquel entonces se trataba principalmente de las desventajas de la residencia electrónica y de los datos disparatados que hay que proporcionar para obtenerla.
Lo que era o es bueno de Estonia y la residencia electrónica
Antes de hablar de Estonia y de aclarar las cosas que han cambiado en 2025 (y que cambiarán en un futuro próximo), nos gustaría resumir de nuevo por qué Estonia y, en particular, la OÜ (siglas de la sociedad limitada estonia), han sido útiles y qué ventajas han aportado. Encontrarás todas las ventajas en detalle en este artículo del blog.
Estonia era especialmente atractiva para los Turistas Perpetuos y los empresarios online debido a varias ventajas:
- Fácil creación de empresas: gracias a la e-residency, cualquier persona en cualquier parte del mundo podía crear y gestionar una empresa estonia completamente online sin necesidad de estar físicamente en Estonia. Esto simplificó y digitalizó la administración.
- Regímenes fiscales favorables: Estonia fue pionera en el mundo en la tributación diferida, en la que las ganancias que permanecen en la empresa y se reinvierten están exentas de impuestos. Solo los dividendos a los accionistas estaban sujetos a un impuesto de sociedades del 20 % en el momento del reparto. Sin embargo, esto no era un impuesto en origen, por lo que los dividendos siempre podían transferirse libres de impuestos. Mientras tanto, países como Georgia y Letonia han copiado este modelo.
- Salario libre de impuestos para no residentes: los socios no residentes en Estonia no tenían que pagar un impuesto sobre la renta por los salarios que se pagaban a sí mismos (siempre que estuvieran correctamente estructurados), lo cual era especialmente ventajoso para los nómadas digitales. Probablemente esta fue la razón principal por la que la OÜ era tan atractiva para los empresarios que operan a escala global.
- Atractivo para las estructuras de holding: Estonia también era interesante como sede de sociedades holding gracias a sus convenios de doble imposición y a la renuncia a la retención en origen. Los beneficios podían transferirse a las filiales libres de impuestos y las ventas podían capitalizarse libres de impuestos.
- Bajo capital inicial: el capital social de la OÜ era de tan solo 2.500 euros, lo que hacía asequible la creación de una sociedad de capital. Ni siquiera era necesario desembolsarlo, ya que la responsabilidad se limitaba a esta cantidad.
Lo que no estaba tan bien en Estonia
Estonia siempre ha hecho publicidad de ser pionera en el mundo empresarial digital y en las residencias. Sí, puede ser que fuera el primer país del mundo que permitiese hacer todo digitalmente, que la e-residency fuera la primera de este tipo. Sin embargo, el problema era que, en el fondo, nos encontrábamos más que nada ante un buen marketing que hacía que empresarios y nómadas digitales invirtieran en Estonia y fundaran sus empresas allí.
Estonia se jactaba de que la creación de empresas era una de las más rápidas del mundo. Puede que sea así si solo se tiene en cuenta el tiempo de constitución de la empresa. Es relativamente rápida, pero, por desgracia, solo después de haber obtenido la residencia electrónica. Y eso puede llevar de cuatro a seis semanas. También se podía crear de forma clásica a través de un notario en el país, pero aquí el tiempo de espera hasta el registro era de seis semanas. A modo de comparación: en algunos estados de EE. UU. o en Reino Unido, el registro se tiene en 24 horas.
Además, Estonia se ha excedido en exceso con los datos que se solicitan al solicitar o renovar la e-residency. Ya escribimos hace tiempo un artículo detallado sobre este tema. En nuestra opinión, una cosa es intentar ser transparente y otra cosa es la información que te piden para esta residencia electrónica.
Sin embargo, el mayor truco de marketing fue que muchos vieron la e-residency (el nombre incluye la palabra «residencia») como un «permiso de residencia real». Desafortunadamente, este nunca ha sido el caso. La e-residency solo permitía a sus titulares utilizar el sistema fiscal digital de Estonia y poseer una empresa gestionada digitalmente. ¡Esto no tiene nada que ver con un permiso de residencia (especialmente para no europeos)!
Esto llevó a que, debido a este malentendido, muchos pensaran que con la e-residency y la empresa estonia ahora tenían un permiso de residencia o domicilio fiscal en Europa o en Estonia. Pero, por supuesto, este no es el caso. Por un lado, siempre hay que distinguir entre una persona física y una persona jurídica. Por otro lado, el domicilio fiscal solo es necesario para una persona física. Nos gustaría volver a abordar aquí las diferencias entre un domicilio fiscal y un domicilio fiscal.
Aclarando la situación: La diferencia entre un domicilio fiscal y un domicilio de cumplimiento normativo
Para las personas que tienen un domicilio fijo y residen de forma permanente en un país, donde viven y trabajan, el domicilio fiscal y el domicilio de cumplimiento normativo son lo mismo. Para las personas que no entran en esta categoría, la situación es un poco diferente.
Un domicilio de cumplimiento normativo solo sirve para identificarte como una «persona real» ante bancos y corredores de bolsa. Los bancos lo hacen exigiéndote facturas de consumo o un número de identificación fiscal. Una factura de consumo puede ser, por ejemplo, la factura de la luz de tu casa o el contrato de Internet. Cualquier documento emitido por «otras fuentes» que tenga tu nombre como dirección y muestre que «vives» en esa casa se considera una factura de consumo. Si tienes un número de identificación fiscal de un país, esto también sirve como prueba para los bancos de que también resides allí. Los números de identificación fiscal o los certificados fiscales no se entregan así como así en las oficinas de Hacienda. Por lo tanto, es muy importante mantener un domicilio de cumplimiento (especialmente para el Turista Perpetuo) para cumplir con los requisitos KYC (Know Your Customer) de los bancos.
La diferencia con el domicilio fiscal es que el domicilio de cumplimiento no implica necesariamente la obligación de pagar impuestos en ese país. Esta es precisamente la gran pregunta de los viajeros perpetuos, que por un lado necesitan un domicilio de cumplimiento, pero por otro deben (o quieren) evitar el domicilio fiscal para no estar sujetos a impuestos. Por supuesto, también existe la posibilidad de que crees un domicilio fiscal a propósito para protegerte de otros países. Si puedes demostrar que tienes tu residencia fiscal en un país con impuestos bajos (incluso al 0 %), será difícil que otros países te graven. Tener residencia fiscal no es malo en sí mismo, solo tienes que tener la correcta (por ejemplo en Tailandia, Georgia o Paraguay). La residencia fiscal se determina por el lugar donde tienes tu centro de vida, es decir, donde tienes relaciones privadas o comerciales en un país. Además, depende de dónde te encuentres realmente. Al final, los hechos determinan si puedes demostrar o no un domicilio fiscal y dónde.
Por cierto, Estonia no es un país especialmente interesante para mantener una residencia de compliance, sobre el papel. Al igual que ocurre en Austria o Alemania, por ejemplo, ya solo por tener acceso a una vivienda allí podrías acabar convirtiéndote en residente fiscal. (Hace no mucho publicamos un artículo en el que hablábamos de los países en los que puedes mantener una vivienda a tu disposición sin convertirte en residente fiscal).
Cambios fiscales concretos en 2025
Como ya se ha indicado anteriormente, en Estonia se han producido cambios fiscales considerables. Los aumentos de impuestos siempre son entretenidos de ver (al menos si no te afectan). Lo único que se observa es que son cambios arbitrarios de porcentaje, y eso es todo lo que ocurre. Al azar. Te damos una visión general de todo lo que cambia:
- IVA: el IVA estándar aumentó del 20 % al 22 % a partir de 2024 y al 24 % a partir de 2026. El IVA reducido para el alojamiento aumentó del 9 % al 13 % a partir de 2025 y para los productos de prensa del 5 % al 9 %.
- Impuesto sobre la renta: el impuesto sobre la renta para empresas y particulares aumentó del 20 % al 22 % a partir de 2025.
- «Impuesto sobre misiles»: para adquirir armas de defensa contra Rusia, a partir de 2026 se gravará directamente un 2 % adicional de cualquier OÜ. En este caso no estamos hablando de un impuesto diferido, sino de un impuesto de sociedades que se aplicará directamente, el año en el que se haya obtenido el beneficio. El impuesto total será, por tanto, del 24 % a partir de enero de 2026 (el 22 % se paga en el momento de la distribución y el 2% el año en el que se obtuvo el beneficio).
- Impuesto sobre dividendos: el impuesto de sociedades reducido del 14 % sobre los dividendos distribuidos periódicamente se eliminará en 2025, al igual que el impuesto de retención del 7 %. Esto significa que los dividendos se considerarán ingresos normales y estarán sujetos al tipo impositivo normal sobre la renta. Tener una sociedad holding no protegerá de la carga fiscal total del 24 % en el momento de la distribución.
- Exención básica: a partir de 2024 se aplicará una exención básica uniforme de 8.400 euros para todas las personas, que sustituirá a las exenciones escalonadas anteriores. Se suprimirán la exención fiscal por prestaciones por hijos y la renta exenta de impuestos no utilizada del cónyuge, así como la deducción fiscal por intereses de préstamos para la construcción de viviendas.
- Impuestos especiales: el impuesto especial sobre el alcohol y el tabaco aumenta un 5 % anual entre 2024 y 2026. Por supuesto, el Estado también quiere participar del placer de las personas.
- Impuesto sobre los juegos de azar: el impuesto sobre las apuestas online aumenta del 5 % al 7 % hasta 2026, mientras que el de las loterías subirá del 18 % al 22 % a partir de 2024.
- Desajustes híbridos (ATAD2): Se especifican las normas contra los desajustes híbridos y, con carácter retroactivo a partir de 2023, se aplica una excepción para los vehículos de inversión colectiva.
- Proveedores de servicios de pago: A partir de 2024, los proveedores de servicios de pago deberán notificar los pagos transfronterizos que superen los 25.000 euros por trimestre.
- Impuesto de circulación: A partir de mediados de 2024 se introducirá un impuesto de circulación con una tasa de matriculación y una tasa anual basada en las emisiones de CO2. Un caso clásico de: «¿Dónde podemos sacar más dinero de los bolsillos de la gente?». Ah, perdón, queríamos decir robar, por supuesto.
- Representante fiscal para no residentes: No será obligatorio ya designar un representante fiscal para el registro del IVA.
Pero eso no es todo, en Estonia también empeoran otras cosas
En el último párrafo solo hemos considerado los cambios fiscales. Estos se producen, por supuesto, debido a la presión de otros países y de la UE. Al fin y al cabo, hay que adaptarse para poder garantizar una tributación mínima común en todos los países. En los últimos años, Estonia ha tenido cada vez más problemas, ya que a la UE no le han pasado desapercibidas los planes del país para mostrarse como país de bajos impuestos. Muchos bancos, en particular, han tenido cada vez más problemas con las empresas de Estonia y han cancelado o dejado de abrir cuentas de empresas.
Sin embargo, hay otras cosas que no tienen que ver con la carga fiscal. Por ejemplo, ahora los salarios deben ser «adecuados». En Estonia, un salario de 10.000,00 € ya no se considera adecuado. Es cuestionable quién ha fijado este límite una vez más. El problema es que, debido a estos límites «imaginarios» y absolutamente arbitrarios, es ahora más difícil sacar dinero de la empresa en Estonia libre de impuestos. En primer lugar, el salario ya está limitado en cuanto a lo que se puede pagar y, en segundo lugar, el salario del director general está sujeto a un impuesto del 33 %, ya que se considera trabajo puramente administrativo y, por lo tanto, está sujeto al impuesto social estonio.
Hasta ahora, el director general también podía cobrar un salario de empleado libre de impuestos si el servicio no se prestaba en Estonia. Anteriormente, esto estaba vinculado a una cierta proporción: el director general tenía que velar por una relación equilibrada entre el salario imponible del director general y el salario libre de impuestos de los empleados y, de hecho, realizar actividades que generaran valor añadido. Cuando esto se abolió en 2019, la OÜ estonia se convirtió de repente en un modelo de ahorro fiscal extremadamente interesante. Sin embargo, la seguridad jurídica siempre fue un tema crítico: incluso algunos de nuestros clientes presentaron demandas (que en aquel entonces prosperaron) contra la administración tributaria para hacer valer el modelo. No obstante, no creemos en la sostenibilidad del salario exento de impuestos (al menos como director gerente, que es lo que uno mismo suele ser en las OÜs unipersonales) y esperamos que en el futuro se impongan mayores restricciones sobre la cantidad que realmente se puede pagar exenta de impuestos. Los límites exactos aún están por determinar, pero en su momento se podían deducir de una sociedad unipersonal sumas de cinco cifras libres de impuestos. La exención fiscal de solo 8400 euros al año para los residentes fiscales muestra hacia dónde podría ir el viaje.
En el futuro, habrá que pasar por una costosa distribución de dividendos y, en el mejor de los casos, ¡solo se podrá disfrutar de un salario más bajo libre de impuestos! También se pondrá freno a la liquidación de empresas de terceros países o a los préstamos sin amortización periódica mediante una fijación de precios de transferencia más estricta y otras leyes. Dado que, en última instancia, se requiere una contabilidad, las distribuciones encubiertas de beneficios saldrán a la luz tarde o temprano, aunque las pequeñas OÜ no estén sujetas a auditoría.
Otro punto a tener en cuenta para los que realmente vivan a Estonia es el fuerte aumento del coste de la vida. Desde que se dejaron de importar materias primas y energía de Rusia, los precios de los productos de uso cotidiano han subido rápidamente. Muchos estonios prefieren armarse contra Rusia en lugar de pensar en su propio bienestar. Ahora se les recompensa con el «impuesto cohete» del 2 %.
¿Qué alternativas existen a las empresas en Estonia y a la e-residency?
La OÜ en estonia estuvo bien mientras estuvo bien. Esos tiempos han pasado definitivamente. Simplemente hay mejores alternativas que generan menos dolores de cabeza, impuestos y gastos. En realidad, siempre han existido, pero una publicidad hábil, de la que siempre hemos advertido, ha hecho que decenas de miles de nómadas digitales se establezcan en Estonia.
Como ya se ha mencionado, la e-residency se comercializó muy bien, fue pionera en la administración digital de estructuras corporativas y, si se hacía bien, era un paraíso fiscal en el centro de Europa. Aunque estas ventajas siguen existiendo en parte, los cambios actuales dan pie a preguntarse si todavía vale la pena crear una empresa en Estonia, emigrar a Estonia o incluso querer utilizar el sistema de Estonia.
Una de las mejores alternativas es la LLC en Estados Unidos. La LLC ofrece más ventajas desde el principio en la mayoría de los estados americanos: por definición, es más conocida y reconocida internacionalmente (Estonia es simplemente un país pequeño en comparación con EE. UU.). La LLC en USA también está exenta de contabilidad. La OÜ estaba y sigue estando obligada a llevar la contabilidad y, a partir de ciertos volúmenes de negocios, a realizar una auditoría. Esto implica esfuerzo, tiempo y dinero. Con la LLC, en principio, puedes hacer lo que quieras. No tienes que demostrar solvencia y tampoco existen cosas como el «salario inadecuado». No hay límites de facturación o beneficios: la escalabilidad depende únicamente de tu habilidad para contratar a tus empleados de forma remota. Las ganancias millonarias de la noche a la mañana en tu cuenta personal son algo habitual en la LLC.
Lo que Estonia promueve con la residencia electrónica ya era completamente normal en la mayoría de los estados de EE. UU. y también en lugares como el Reino Unido desde hacía años. Crear una empresa online no es algo inusual, y mucho menos se necesita una complicada solicitud para obtener una tarjeta inteligente que se emite semanas después. El que quiere, puede registrar su LLC con nosotros en un plazo de dos semanas y solo tendrá que escanear su pasaporte.
Conclusión
Estonia y la OÜ estonia eran buenas para ciertas cosas y, sobre todo, han dado a los no europeos la oportunidad de registrar online un negocio en la UE que es fácil de gestionar. Para algunas personas, esto ya significaba que podían obtener una gran ventaja de ello; después de todo, crear una empresa en otros lugares es mucho más complicado. La tributación diferida también fue pionera en este sentido y conllevó muchas ventajas que aumentaron el patrimonio total de la empresa. La combinación de los repartos de dividendos y de las normas fiscales especiales para no residentes supuso una ventaja. Estonia era un lugar interesante, sobre todo para los equipos remotos, ya que el salario por servicios prestados fuera de Estonia no está sujeto a una obligación tributaria limitada como en otros países de la UE.
En vista de la complejidad, los enormes cambios fiscales de 2024 y 2025 y la presión a la que está sometida Estonia por parte de la UE, para la mayoría de casos, ya no tiene sentido solicitar la e-residency para montar una empresa en Estonia. Si quieres vivir en Estonia porque te gusta el país, puedes hacerlo. Pero aquí también hay muchas desventajas y la situación es cada vez más tensa, sobre todo en lo que respecta al coste de la vida y a la carga fiscal.
Si has solicitado la e-residency solo por los impuestos, como hemos explicado hoy, tienes muchas más opciones de hacerlo de forma más eficaz, sencilla y menos estresante con otras estructuras como la mencionada LLC en Estados Unidos. Y sobre todo de forma sostenible, sin tener que cambiar tu configuración al cabo de unos años. Hemos ayudado a miles de personas a llevar una vida más libre, ya sea a través del cambio de residencia, la creación de empresas o la inversión en una amplia variedad de áreas.
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